¿Cómo pudo Goya pintar un elefante de la India sin haber visto en su vida un paquidermo de esa especie en España y sin haber viajado a la India? Y lo que resulta más sorprendente: a diferencia de otras monarquías la borbónica no tiene entre sus iconos a los elefantes sino a los leones.
Pero lo cierto es que Goya en su serie de estampas «Los Disparates » representa a un elefante de la India sin colmillos, y además lo dibuja de forma tosca, como si al pobre animal lo hubiesen inyectado botox por todo el cuerpo. Goya lo retrató tal y como lo vio. Goya siempre reflejó la realidad tal y como la vio.
Parece ser que al rey Carlos III le habían regalado un ejemplar de este elefante de la India y lo tenía en su zoológico particular del palacio de Aranjuez. Cuando el animal murió en 1777 el rey mandó que lo taxidermizaran; el taxidermista hizo un trabajo horroroso y Goya se sirvió del elefante disecado como modelo.
Se dice que con este elefante Goya representa al ingenuo pueblo español embaucado y traicionado por su Rey: Fernando VII, el más cobarde, cruel y taimado de los hombres. El animal representa la fuerza, el temple y la sagacidad, pero aparece desprovisto de sus únicas armas defensivas y ofensivas: los colmillos. Como el elefante de Goya el pueblo español siempre secuestrado por la voluntad de los gobernantes corruptos de turno.
