Historia de Talavera en 1936. En los últimos días de agosto de 1936, Talavera de la Reina se convirtió en epicentro estratégico del conflicto. Ante el avance de las tropas sublevadas desde Extremadura, el Gobierno de la República concentró en la ciudad buena parte de sus fuerzas militares y material armamentístico en un intento desesperado por proteger la capital.
La caída de Talavera
La caída de Talavera, consumada el 3 de septiembre, tuvo consecuencias políticas inmediatas: la dimisión del presidente José Giral y la llegada al poder de Francisco Largo Caballero, quien asumió también la cartera de Guerra.
La importancia de Alfonso Sánchez Portela
La tragedia de Talavera quedó plasmada gracias a la cámara del fotoperiodista Alfonso Sánchez Portela, quien capturó la llegada de tropas, el frente de batalla y la desbandada civil. Estas imágenes forman parte del valioso Archivo Alfonso, hoy custodiado en el Archivo General de la Administración.
Alfonso fue testigo privilegiado de los grandes momentos históricos como: la guerra de África, acontecimientos en la España de Primo de Rivera y la II República. Presenció el asalto al Alcázar de Toledo, allí pudo fotografíar la voladura en septiembre de 1936.
Tensión bélica
Entre el 31 de agosto y el 1 de septiembre, Talavera en plena tensión bélica. Mientras tanto, las columnas rebeldes comandadas por Yagüe —formadas por regulares marroquíes y legionarios— se abrían paso desde Mérida hasta Navalmoral de la Mata, tras arrasar Badajoz el 15 de agosto.
A pesar de los esfuerzos de la “Columna Fantasma” del capitán Uribarri y los ataques aéreos republicanos, el avance rebelde fue imparable. El general Riquelme, al frente del Teatro de Operaciones del Centro de España (TOCE), estableció el cuartel general en Talavera, aunque fue el coronel Mariano Salafranca quien organizó la defensa con cerca de 10.000 hombres, frente a los 5.000 de Yagüe.
Una población bajo bombardeos
La ofensiva republicana no logró frenar el cerco. El día 3, apoyadas por la aviación, las tropas sublevadas cercaron las vías de acceso, inutilizaron el tren blindado republicano y sembraron el pánico. Las tropas y la población huyeron hacia Madrid bajo bombardeos, en un éxodo desordenado.
Simbología
La derrota en Talavera simbolizó la fractura del poder republicano en los primeros meses del conflicto. El nuevo gabinete de Largo Caballero integró a figuras como Indalecio Prieto, Juan Negrín y Jesús Hernández.
Historia de Talavera en 1936.
